EN DEFENSA DE LA CIENCIA, LA CULTURA Y LA EDUCACIÓN: NO A LA ELIMINACIÓN DE LOS FIDEICOMISOS
La iniciativa impulsada por el Ejecutivo federal y promovida por las y los legisladores de Morena en la Cámara de Diputados que recorta y desaparece 109 fideicomisos es un abuso sobre los recursos públicos y un atentado contra el desarrollo científico, tecnológico y cultural del país. El gobierno federal busca dirigir el sentido de la investigación científica y del desarrollo cultural del país. No es un tema de ahorro, es un asunto de control sobre la comunidad científica y cultural. No lo vamos a permitir.
Desde Movimiento Ciudadano respaldamos, con toda nuestra capacidad política, a la comunidad científica, artística y cultural del país y convocamos a todas las fuerzas políticas, incluidos legisladores y legisladoras de MORENA que están en contra de esta propuesta irresponsable, a evitar la extinción de los 109 fideicomisos y a actuar con responsabilidad para proteger y fortalecer los fondos que por años han servido al desarrollo de la cultura, la ciencia, el conocimiento y el desarrollo de las ciudades en nuestro país.
El Ejecutivo federal, en complicidad con su mayoría legislativa, estaría tomando 68 mil millones de pesos que hoy se usan en rubros como la protección de personas defensoras de derechos humanos; la atención a desastres naturales, el equipamiento a deportistas y atletas paralímpicos; la operación de centros de investigación científica y tecnológica; el fomento al cine, el bienestar de las zonas metropolitanas, el combate al cambio climático, la sustentabilidad energética y para la operación de Centros Públicos de Investigación, entre muchas otras necesarias para la justicia social y el desarrollo de las entidades y municipios.
Ya lo externaron cientos de organizaciones e instituciones afectadas por la iniciativa: que se revisen y regulen los fideicomisos a partir de sus fines e impactos en la población que depende de estos instrumentos, y no sólo del efecto en las finanzas, de lo contrario puede convertirse en una medida discrecional. En Morena afirman que con esta decisión habrá más dinero para programas sociales, pero la realidad es que este gobierno no pone primero a los pobres. A dos años de gobierno, el promedio de gasto en programas sociales es inferior al promedio durante el sexenio previo (ver bit.ly/3nhurl8).
Mientras se pretende dejar sin recursos a universidades y centros de investigación, académicos, becarios, atletas, al cine mexicano y a la innovación contra el cambio climático, se sigue aumentando el presupuesto que ya es de miles de millones de pesos a los proyectos faraónicos del Presidente, como el Tren Maya, que prevé una inversión de 132 mil 447 millones de pesos en 2021; Dos Bocas con 45 mil 050 millones de pesos, o Santa Lucía, con un presupuesto de 21 mil 315 millones de pesos para el próximo año.
Hoy, en medio de la crisis económica y social que enfrentamos por la COVID-19, los fideicomisos públicos son necesarios para asegurar suficiencia presupuestaria para la garantía de derechos humanos en áreas estratégicas. Pero no sólo eso, lo que está en juego hoy es la autonomía de las comunidades científica y cultural del país para decidir con libertad el sentido de su investigación y la producción cultural. ¡No lo permitamos!