En la Bancada Naranja condenamos el llamado del Presidente a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) para desobedecer mandatos judiciales. Este hecho no sólo es grave, rompe un límite en su actuar al comprometer el Estado de derecho y pretender estar por encima del Poder Judicial.

El embate constante a dicho Poder desde las conferencias mañaneras es muestra de que el actuar de este gobierno se ha desvirtuado y lo coloca en la categoría de autócrata. La instrucción para desobedecer órdenes judiciales de liberación de detenidos, no sólo es una ilegalidad, intenta vulnerar de manera clara toda división de poderes.

Ante las descalificaciones del Ejecutivo, confiamos en el actuar del Poder Judicial para brindar certeza jurídica, no sólo en los procesos referentes al sistema penitenciario, también en el resto de sus funciones. Mantener su autonomía y total independencia de sus decisiones es indispensable. Movimiento Ciudadano hará uso de cualquier instrumento legal y político para que se respeten los contrapesos y las instituciones autónomas.